Por: Carlos Arturo Gamboa B.
Catedrático Universidad del Tolima
1.
Mientras algunos compran y acomodan sus
bolas navideñas, visten árboles artificiales y preparan pesebres, en la
Universidad del Tolima la comunidad no sale del asombro frente a la arremetida
del rector Herman Muñoz y sus “ambiciosos” Reyes Magos que han emprendido un
plan de retaliación contra la Asociación Sindical de Profesores. ¿Navidad
negra? Esta afrenta al pensamiento crítico ha estado alentada por los falsos
rumores de los edecanes de heteronomía, expertos en difamaciones que han divulgado
el rumor de que los docentes han “falsificado diplomas”, son corruptos, no
hacen nada. Pues toca decirle a la comunidad y a la región, que los docentes
que ellos “quieren expulsar” de la Universidad del Tolima, y que son Directivos
de ASPU, han cometido graves errores: Han denunciado la corrupción, han
levantado su voz de protesta ante la crisis universitaria, han gritado
públicamente sus diferencias, han liderado procesos contra la megaminería, y
eso es un enorme pecado, porque el poder se cree sacro-santo, más en épocas
navideñas. Los profesores solo tienen algunos estudios internacionales que no
han podido ser convalidados debido a las engorrosas legalidades del sistema
educativo colombiano, seudo-legalidades que los abogados de la Administración
usan como pretexto para ocultar sus verdaderas intenciones persecutorias. Si nos
informamos un poco, encontraremos que varias universidades públicas han
solucionado estos problemas, no expulsando los docentes, sino entendiendo que
no es culpa de ellos, que los tan nombrados procesos de globalización educativa
tienen muchas talanqueras para homologar, validar y equiparar saberes. Frente a
los otros argumentos usados para desprestigiar los docentes, invito a que
busquen la trayectoria de los profesores Gantiva y Martínez, si quieren para
que no hagan mucho esfuerzo, péguense una pasadita por la bodega de google.com.
2.
Hernando Andrés Clavijo, estudiante
de séptimo semestre de Administración de Empresas de la Universidad del Tolima,
sufre el embate de quienes consideran la creatividad de la denuncia un acto
digno de ser “disciplinado”. En tiempos como estos cuando defender lo público
es un acto imperativo para cualquier sujeto universitario, pretender acallar
las voces y perseguir el pensamiento crítico es inaceptable. No puede esta
Facultad tan importante y sus miembros caer en la lógica de los “reducidores de
cabezas del pensamiento crítico”, quienes ven encarnaciones de demonios en todo
aquel que exprese una idea distinta. Colocar un ataúd a manera de performance
no es un delito, es un reclamo a la lenta muerte de lo público, pero si no
vemos más allá de nuestras limitadas ventanas, podremos confundir un libre
derecho a la protesta con amenazas, y ese es el discurso de los tiranos. Si
perseguimos al que protesta y da la cara ¿qué argumentos tenemos para criticar
a quien la oculta?
3.
En la entrada de la Universidad del
Tolima encontré un cartel cuyo mensaje debería retumbar los oídos de la
comunidad: “La universidad no termina aquí”. Ojalá lea ese mensaje la reina de
la proyección social, que confunde la interacción con informes de gestión
recogidos de las distintas dependencias, en donde la “eventotitis” es el
síntoma que evidencia la grave enfermedad conceptual. La Universidad del Tolima
es una potencia de esa interacción social, solo basta mirar hacia el IDEAD,
pero aún no ha llegado un rector que sea capaz de dilucidar esa fortaleza y
apostarle de lleno a ella.
4.
Me dicen, pero no pude verificar, que
algunos estudiantes de artes fueron recriminados por hacer una muestra de
dibujos eróticos de corte homosexual. No es de extrañar porque habitamos la
Universidad Medieval del Tolima, en donde es más fácil encontrar un escapulario
que un libro.
5
El próximo lunes 9 de diciembre el
becario de la Facultad de Humanidades y Artes, Albeiro Arias, hará la
presentación de dos libros: Poesía del
Tolima (1905-1955). Bibliografía y panorama de autores; y Desterrados de la Luz. Ambos libros son
productos de sendos premios recibidos por el autor. Bienvenidos estos dos
nuevos textos que contribuyen a fortalecer la producción académica de la región
y de la Universidad del Tolima. La presentación será en el Auditorio Los Ocobos
(antigua sede de Cooperamos) a las 6:30 PM.
6.
El viernes 6 de diciembre a las 5:00.
En el Parque Ducuara de la Universidad del Tolima, se darán cita distintas
expresiones críticas del pensamiento universitario para encender una vela contra
la persecución: Contra los osos depredadores de Salmones, contra los decanos
que censuran a los estudiantes que se expresan libremente, contra el rector y
su cofradía de “reducidores de cabezas críticas”. Encenderemos una vela porque
no podrán apagar nuestros sueños.